Por la Consagración de Rusia al Corazón Inmaculado, con intención especial por Mons. Jean Michel Faure y la SAJM
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acuérdate, amada Señora de La Salette, verdadera Madre de Dolores, de las lágrimas que derramaste por mí en el Calvario; acuérdate también del cuidado incesante que ejerces para protegerme de la justicia de Dios; y considera si puedes desamparar ahora un hijo tuyo, por quien tanto has hecho. Inspirado por este consolador pensamiento, vengo a arrojarme a tus pies, a pesar de mi infidelidad e ingratitud. No rechaces mi oración, oh Virgen de la reconciliación, conviérteme, alcánzame la gracia de amar a Jesucristo sobre todas las cosas y de consolarte también a Ti viviendo santamente, para que un día pueda verte en el Cielo. Amén.
(Menciona aquí tu petición...)
Nuestra Señora de La Salette, reconciliadora de pecadores, rogad sin cesar por nosotros que recurrimos a Vos.
Padre nuestro, Ave María, Gloria
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